20081212

confesión


Mi muy bien ponderado Felipe,
creo que he descubierto una de las más retorcidas incógnitas de mi persona... y haberla despejado seguro es, será, tan gratificante para ti como para mí: he descubierto la razón de mis contantes tropiezos mecanográficos. todo se remonta a los años 1995-1998, cuando hacía trampa en las sesiones de mecanografía y las tareas, en vez de realizar cada una de las líneas de los ejercicios del manual, usaba mi computadora y aplicaba la prohibida e igualmente satisfactoria "ctrl + v", y, claro, maestra del engaño y la decepción, agregaba uno que otro error esporádico en alguna línea -eso sí, no más de 5, pues de rebasar esta cantidad la tarea era considerada inadmisible-. sumando los años, las tormentas, el icq, el msn, el gmail chat, el skype; los ensayos, los desvelos, las prisas... el resultado ha sido tal que yo, a mis 25 años, no sé mecanografiar. no sé ni qué dedo uso en cual tecla, ni cuál es la fila que le corresponde a tal o cual mano, sólo sé que da resultado. porque eso sí, mientras los índices bailan tan prestos al compás de la música del itunes, el resto flojea; los explotan. cruzo los dedos, se atropellan unos a otros: con el índice derecho llego hasta la "e", con el índice izquierdo, a veces hasta toco la "o"; de la "a" a la "z": sobre mi teclado impera la anarquía, una anarquía que, enhorabuena, da resultados, porque yo no me explico cómo demonios tecleo, y no soy una tortuguita cuando lo hago.